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Recetas calientes para combatir el frío en familia

Con la llegada del frío, nada mejor que disfrutar de platos que no solo reconforten el estómago, sino también el alma. Sentados cómodamente en un puff juvenil, rodeados de nuestros seres queridos, los momentos compartidos alrededor de una mesa se convierten en recuerdos preciosos. Es en estos encuentros donde la calidez de un buen plato puede hacer que el ambiente sea aún más acogedor.

En este post te contamos cómo preparar recetas que harán que tus reuniones familiares sean aún más especiales. Olvídate del frío exterior y concentra toda tu atención en el calor de tu hogar, decorado con elementos tan cómodos como un cojín para palets, que invita a todos a relajarse y disfrutar juntos de una comida deliciosa, tanto para los amantes de las terrazas como en nuestro salón.

Puff Pera

Puff Lounge

Big Puff

Puff Pirámide

1. Sopas y cremas: el abrazo cálido

Sopa de calabaza y zanahoria con un toque de jengibre

Esta sopa, rica en vitaminas y con un sutil toque picante gracias al jengibre, es perfecta para calentar el cuerpo y fortalecer el sistema inmunitario. Comienza por saltear cebolla y ajo en una olla grande, luego añade la calabaza y las zanahorias cortadas en cubos. Agrega caldo de verduras y un poco de jengibre fresco rallado. Deja que hierva y luego cocina a fuego lento hasta que todo esté tierno. Tritura hasta obtener una crema suave y sirve con un chorrito de crema de leche y unas semillas de calabaza tostadas para un toque crujiente.

Crema de lentejas rojas al curry

Esta crema es ideal para los días más fríos. Las lentejas rojas son una fuente excelente de proteínas y fibra, y el curry aporta un calor reconfortante. Sofríe una cebolla picada, añade las lentejas y cubre con agua o caldo. Incorpora una cucharadita de curry en polvo y deja cocer hasta que las lentejas estén blandas. Tritura todo y sirve con un poco de yogur natural para equilibrar los sabores.

2. Guisos y estofados: confort en cada bocado

Estofado de ternera con patatas y zanahorias

Un clásico estofado que nunca falla. En una olla grande, dora trozos de ternera, luego añade cebolla picada y dientes de ajo. Incorpora patatas y zanahorias cortadas, un poco de tomate triturado y caldo suficiente para cubrir. Cocina a fuego lento hasta que la carne esté tierna y los sabores se hayan mezclado perfectamente. Un plato que promete calidez y satisfacción.

Guiso de garbanzos con espinacas y chorizo

Este plato combina sabores robustos y reconfortantes. Sofríe chorizo cortado en rodajas hasta que esté crujiente, retira y reserva. En la misma olla, cocina cebolla picada, luego añade garbanzos cocidos y espinacas frescas. Vuelve a introducir el chorizo y añade un poco de caldo para que los sabores se integren. Este guiso es ideal para cargar las pilas en un día frío.

3. Bebidas calientes: un final dulce

Chocolate caliente especiado

Nada como un buen chocolate caliente para endulzar el ambiente. Funde chocolate oscuro con leche y una pizca de canela y nuez moscada. Sirve con nata montada y un poco de cacao en polvo espolvoreado. Una bebida que encanta a niños y adultos por igual.

Té Chai casero

El té Chai es perfecto para entrar en calor. Hierve agua con té negro, canela, clavos, cardamomo y jengibre. Añade leche y deja que se mezclen los sabores. Endulza con miel y disfruta de esta bebida aromática y calentadora.

4. Aperitivos calientes: comienzos acogedores

Croquetas de jamón y queso

Los aperitivos calientes son ideales para comenzar una comida en familia y las croquetas son un favorito indiscutible. Para hacerlas, mezcla en una sartén mantequilla con harina hasta obtener una roux, luego añade leche gradualmente hasta formar una bechamel espesa. Incorpora jamón picado y queso rallado, salpimenta al gusto y deja enfriar la mezcla. Forma las croquetas, pásalas por huevo batido y pan rallado, y frielas hasta que estén doradas y crujientes. Sirve calientes para disfrutar de su delicioso relleno derretido.

Champiñones al ajillo

Este plato es simple pero tremendamente reconfortante. Limpia los champiñones y córtalos en cuartos. En una sartén con aceite de oliva caliente, añade ajo picado y luego los champiñones. Saltea hasta que estén dorados y jugosos, espolvorea con perejil fresco picado y sirve inmediatamente. Este aperitivo es perfecto para calentar el paladar y prepararlo para los platos principales que siguen.

Con estos aperitivos, seguro que tus reuniones familiares comienzan con una nota alta y acogedora. Cada bocado invita a disfrutar juntos del calor del hogar mientras el frío queda fuera. En este post te hemos guiado por varias recetas que garantizan momentos deliciosos y reconfortantes. ¿Preparado para sorprender a tus seres queridos con estos deliciosos inicios?